Este proyecto se propone aportar a una mejor democracia, más participativa e inclusiva, a través de cinco líneas de acción que apuntan a una mayor inclusión de la ciudadanía en la toma de decisiones con el fin de avanzar hacia un desarrollo más sostenible. La primera consiste en generar conocimientos que permitan comprender e identificar posibles cursos de acción para fortalecer la democracia y generar espacios de diálogo frente a los mismos en la perspectiva de compartir conocimientos y aunar estrategias entre distintos actores. La segunda se refiere al mejoramiento de la transparencia y rendición de cuentas de las instituciones públicas, entendiendo que este es un aspecto clave de la gobernanza democrática. La tercera línea de acción apunta a promover la igualdad de género en la gestión de las políticas públicas y a promover una mayor participación de las mujeres para contar con una democracia paritaria y representativa. En cuarto lugar, se busca fortalecer la participación de la sociedad civil en un área de política pública central para el desarrollo del país como es la ambiental, generando conocimientos y reflexión conjunta entre distintos actores para que el desarrollo de estas políticas incorpore efectivamente el principio de participación. Por último, se aportará al proceso de descentralización del país a través del fortalecimiento de capacidades en el ámbito regional y local.

¿Qué logros pretendemos conseguir?

• Contribuir al mejoramiento de los estándares de calidad de la democracia chilena, cooperando con los procesos de fortalecimiento de las instituciones políticas y de la participación y representación política inclusiva en Chile
• Generar espacios de diálogo entre la sociedad civil -incluyendo ONG, academia, privados y centros de estudios- y el Estado que permitan enriquecer las propuestas del ejecutivo y legislativo en materias ambientales.
• Fortalecer las capacidades de los gobiernos regionales y locales para apropiarse de las medidas de descentralización propuestas.